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En los dibujos animados japoneses en general, y en la versión sexualmente explícita del Hentai, encontramos regularmente tipos de personajes bastante especiales. Estas provienen de la imaginación de los dibujantes, pero también son el resultado de las creencias y leyendas locales. Se trata principalmente de personajes antropomorfizados, a través de los cuales los artistas alimentan las fantasías más salvajes de sus lectores. La forma más radical de este tipo de personaje es el Kemonomimi. A menudo se representan en los dibujos animados sexuales porque satisfacen una necesidad fantasmagórica que es a la vez bestial y tabú.

¿Qué es Kemonomimi?
Etimológicamente, Kemonomimi significa "orejas de animal" en japonés (Kemono: animal y Mimi: orejas). Es un término que se utiliza sobre todo en los cómics japoneses (animados o no) para indicar a los personajes que tienen orejas de animal. En la mayoría de los casos, estas orejas de animal están presentes además de las orejas humanas habituales.

¿Para qué sirve dibujar personajes en Kemonomimi?
En la cultura japonesa, los rasgos de belleza suelen tomarse prestados del mundo animal, tanto en lo que respecta a las calificaciones como a los accesorios y transformaciones estéticas. Lo mismo ocurre con los atributos físicos, como la fuerza y la agilidad, pero también con las capacidades intelectuales y psicológicas. El objetivo del Kemonomimi es presentar personajes que reflejen plenamente sus diversas habilidades y fortalezas animales en una naturaleza humana. De este modo, el Kemonomimi satisface la fantasía de ver a los seres humanos dotados de habilidades que sólo poseen los animales, pero también de que seres humanos y animales convivan, incluso en el ámbito de las relaciones sexuales. Esto justifica la fuerte propensión de los dibujos animados hentai con personajes de Kemonomimi.

Kemonomimi, un antropomorfismo radicalizado
En el ámbito de los diseños animados, es muy común que los diseñadores utilicen el antropomorfismo para sus personajes. El antropomorfismo consiste en dar una apariencia y morfología humanas a objetos o animales. Los personajes de Kemonomimi son los más radicalmente antropomorfizados, ya que parecen casi humanos. Sus caracteres animales suelen consistir únicamente en las orejas y, en la mayoría de los casos, en la cola. El resto de la anatomía es completamente humana, en términos de piel, cara, torso e incluso partes generales.

El Kemonomimi en Hentai
Como sabes, en el hentai los personajes tienen formas, aspecto y medidas tanto físicas como sexuales fuera de lo común. También es el lugar donde no se hace ninguna censura moral a las prácticas sexuales, es la libre expresión sin tabúes. Esto se hace para permitir a los lectores experimentar a través de sus personajes, sus impulsos sexuales reprimidos por la sociedad. Los personajes de Kemonomimi facilitan la consecución de estos dos objetivos, sin olvidar que su particularidad es de quintaesencia sexual. Por eso son muy populares en el Hentai.

El inusual rendimiento sexual y físico de Kemonomimi
La mayoría de las limitadas prestaciones físicas de los humanos se extrapolan de forma natural en los animales. Lo mismo ocurre con el rendimiento sexual. Por ejemplo, la exagerada virilidad del miembro del caballo o la agilidad del gato. Al identificarse con los personajes de Kemonomimi, el lector tiene la sensación de compartir esas mismas facultades. Experimentan una sexualidad transpuesta a través de estos personajes. Así, el lector se siente tan vigoroso como un caballo, o el lector tan ágil y felino como un gato.

Expresión sexual libre, sin tabúes
Tener una experiencia sexual con animales, verlos aparearse o apropiarse de su carácter bestial durante el sexo, son fantasías de muchas personas. Sin embargo, la moral social y la educación religiosa son obstáculos para la expresión de estos deseos, que son reprimidos. A través de los personajes animales antropomorfizados que los Kemonomimi, es posible vivir libremente a través de sus amores, los propios deseos fantasmagóricos.

La quintaesencia sexual de la particularidad de los personajes de Kemonomimi
El oído es un órgano de los sentidos y un atributo sexual de gran importancia en la cultura japonesa. Por eso la mujer japonesa tradicional se cubre las orejas con el peinado. Los deja al descubierto, soltando el pelo, cuando se acerca el acto sexual. La acción de soltar las orejas es una invitación sexual, o si lo prefieres, una señal de su calor sexual. Simbólicamente, las prominentes orejas de animal que sobresalen de las orejas humanas de los personajes de Kemonomimi es un signo de gran libertad, especialmente en términos sexuales.